viernes, 22 de febrero de 2013

Reflexión de Jueves publicada en Viernes


Desaparecer. Esfumarme. Huir. Irme. Olvidar. Marcharme. Evaporarme.
Escribo esto desde la mesa de mi despacho. He terminado un agotador recurso de apelación, he enviado dos demandas recién salidas del horno, contestado a emails y llamadas, tomado dos cafés con leche. Dos. Dos. Yo que máximo me tomo uno a primera hora de la mañana, -corto de café por favor. Y Calentito.- mientras espero el tren. Dos. Hoy he necesitado dos. Un chute de cafeína para aguantar el jueves. Jueves. Que estás a un día del viernes. Que me haces la semana llevadera y a la vez agotas mis fuerzas. Me pones al límite. Preparándome para el fin de semana.
Partir. Fugarme. Evadirme. Desertar. Escabullirme. Volatilizarme.
Es lo que hoy, día 21 de febrero de 2013, me gustaría hacer. Dejar los escritos, las obligaciones, los documentos, las facturas, los plazos, el largo trayecto hasta el trabajo, las prisas, las demandas, los clientes, el gimnasio, las mancuernas, las clases, el tupper, los abdominales, que me vean muy joven para ser abogada, los 15 minutos para la comida, el “pi pi pi” a las 7.30 horas de la mañana.
Sin embargo el gimnasio me gusta. No quiero dejarlo. Quiero tener más tiempo para disfrutarlo. Eso es… reformulo la ecuación. Quiero dejar las prisas, las obligaciones, las insatisfacciones. Ah sí. Y los 15 minutos del tupper. Reivindico comer en casa. Con comida recién hecha. Primero y segundo. ¡Y postre! Y poder echarme una siesta de veinte minutos, mientras veo alguna serie tonta en Divinity.
Pero… quiero seguir cobrando a fin de mes! Oh oh! … Recapacito. Releo. Pienso. Pienso. Pienso. No se me ocurre nada. Pienso –luego existo-.
Claro! Existo. Soy capaz de pensar, de reír, de soñar, de enamorar, de disfrutar de la vida. De los pequeños momentos, que en el fondo son los más grandes y normalmente los menos frecuentes. Placer. Pienso en lo que me produce placer.
Las duchas matutinas, ese primer café con leche del día, encontrar un tupper en la nevera preparado por mi mami, contemplar desde el tren el amanecer, ver cada día el mar, llegar a la oficina cuando aún no hay nadie, ir a los juicios, tener 26 años, ir al gimnasio los medio días, sudar, superarme, sorprender gratamente a los clientes, escuchar la radio mientras trabajo, whatsappear con mis amigas en horas laborables. Me gustan las 6 de la tarde, porque se acerca la hora de volver a casa. Me gusta trabajar con un ordenador porque puedo estar conectada con el blog. Con vosotras. Actualmente me gusta ‘hacer Skypes’. Me gusta la vuelta a casa, ir sentada en el tren, tranquila, serena, relajada, leyendo un buen libro. Me gusta llegar a casa, el olor a pueblo, a césped recién cortado. La alegría que siento cuando veo a mis perritas. Me gusta el cambio automático que se produce en mi voz cuando hablo con ellas. Y el no sentirme ridícula por ello. Me gusta sentir ese amor incondicional de mis niñas. Me gusta besar a mis padres cada día…

Ufff. Si todavía continuáis leyendo deciros que sólo escribo esto porque me sale de dentro, como un huracán, y tengo que soltarlo todo, de golpe, de una, sin releer. Me siento agradecida por la vida que tengo. Y quiero transmitiros este sentimiento por si alguna vez os pasa lo mismo. Por si alguna vez os cansa vuestro trabajo, os cansa vuestra rutina. Para que comprendáis que es vuestra. Y que seguro que tiene momentos únicos.
He querido mostraros un trozo de mi rutina, que como es mía, la quiero mucho. Gracias a todas por estar ahí  ♥

15 comentarios:

  1. Muchoa ánimos con la rutina, porque aunque pueda llegar a agotar siempre es buena.
    Lau, pásame tu correo electrónico y te paso el tutorial de la encuadernación.
    Besos guapa.

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  2. Me gustó mucho este post!

    besitos!

    Charo

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  3. Són moments, ens cal estar una mica al límid per fer balanç i veure que ens agrda i que no en la nostra vida, i modificar, corretgir, eliminar o continuar en el que considerem que realment ens omple i ens motiva per continuar demà!!! Preciós post!!!

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  4. cuanta razón en tus palabras... y es que la rutina tiene trampa y te puede hacer ver el gris y esconder los matices de los colores.
    La vida hay que vivir la y aunque a veces cuesta hay que recordar que los pedacitos de nuestros días normales son eso... nuestros pedacitos de vida.
    verdad?

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  5. Es bueno que pienses así, debes sentirte afortunada de tener una rutina y de "estresarte" en el trabajo...te aseguro que sería peor no tenerlo y no tener esa rutina que a veces agota, estresa y desespera...pero que al mismo tiempo hace posible que se valoren más los pequeños (grandes) detalles que hacen especiales cada día. Gracias por compartirlo. Un beso.

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  6. Ai Lau, que maja eres!! Eres achuchable!!! Pues estoy contigo en que podemos estar todo el día quejándonos de lo que tenemos, pero es mucho mejor valorar lo que tenemos y sobre todo los pequeños momentos del día a día...Ahi van los míos:
    Me gusta ver amanecer cada día, llegar temprano al trabajo y estar tranquila antes de que llegue la gente, reirme en el trabajo, poder ir en harapos al trabajo sin que le importe a nadie, ir en moto sin prisas, me gusta ir por el lateral de la Diagonal, tardas más pero es más bonito, vivir en Gracia, comer en casa, ver programas tontos de divinity medio dormida (lo siento Lau), scrapear y bloggear, ducharme durante 30 minutos, tomar leche con galletas antes de ir a dormir y me gusta tener a mi Xavi diciendo tonterias en una casa tan pequeña que jugar al escondite es una utopía...
    un besito guapa

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  7. pásate por mi blog... hay sorpresa!!!

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  8. Gracias por compartirlo! La belleza de las pequeñas cosas son las que nos hacen sonreír y sentimos felices.
    Los míos:
    Oír el despertador y saber que puedo apagarlo y dormir un poco más, que Blu me despierte para que la deje meterse bajo el nórdico, los besos de buenos días y buenas noches, recibir un mail que avisa de un nuevo comentario en el blog, pasearme por otros blogspot llenos de bonitísimo, olvidarme de todo con mis papeles y tintas, las comidas en familia comentando los tópicos de siempre, un vino con las amigas y charlar sin parar... Y podría seguir. Mucho por lo que sonreír!

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  9. Qué post y que comentarios más chulos! alegoría a la vida cotidiana!

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  10. Jo Laura!!!! Me dejas sin palabras... me he sentido muy identificada con muchas cosas se las que has escrito, lo único que yo tengo 31, jajajajajaj!!!!! Bueno guapa, siempre es agradable leer este tipo de reflexiones y más cuando te identificas con muchas de ellas.

    Besitos y buen finde!!! Hoy no hay pi-pi-pi a las 7:30... jajjajajaja

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  11. Ets la cosa més bonicaaa que hi ha en aquest món!!!! Tan forta, valenta i lluitadora i a la vegada tan sensible, fràgil i melancòlica. NO CANVIIS MAI!!! I segueix creixent sabent valorar i sentint totes aquestes coses. Aquesta és la clau de la felicitat!!!! Un petó preciosaaaaa!! M'encanta aquest post:)

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  12. fea, jijijij
    hacá siglos que no te visitaba

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  13. Muy buena esta declaración de rutinas!!! esa manera de expresar lo negativo y lo positivo de una misma cosa, me encanta!!!!
    Un beso muy fuerte y sigue así!!!

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  14. Ay Laura! no te puedes imaginar cuan identificada contigo me siento!!! (menos en lo de los 26 y el fin de semana que parece agotador, jeje
    besos
    cris
    lalchimisteartisane.blogspot.com

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  15. I quina bona reflexió!! Has aconseguit transmetre tan fluidament que les rutines i les obligacions fan també la nostra vida que esdevenen especials i cal valorar-les; com dius tu, són només nostres. Petons!

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